Con la llegada del verano suelen producirse muchas quemaduras del sol al exponernos en piscinas y playas

La llegada del verano trae consigo muchos casos de quemaduras solares. Pasamos más rato al aire libre y algunas personas obtendrán un agradable bronceado mientras que otras acabaran con quemaduras.

¿Qué son las quemaduras del sol?

Los rayos ultravioleta del sol pueden romper nuestras cadenas de ADN. Si la célula no logra reparar el daño acaba suicidándose, mediante un proceso llamado apoptosis y así se evita su posible transformación a célula cancerosa. Ese proceso libera pequeños restos celulares que son detectados por las defensas de nuestro cuerpo para ser eliminados. Es entonces cuando se produce lo que conocemos como una quemadura: el tejido se hincha, se nota caliente al tacto y se enrojece y produce una sensación de dolor (debido al aprisionamiento de los nervios presentes en el tejido). Cuando ya se han eliminado todos los restos celulares la hinchazón desaparece y las células de piel muertas en el proceso se desprenden. Es entonces cuando nos pelamos.

Medidas a tomar ante las quemaduras del sol

Una vez te has quemado, el objetivo es paliar los efectos, reducir el dolor y las molestias. Hay una serie de medidas que puedes tomar:

  • Toma un analgésico. Para controlar el dolor y la inflamación de las quemaduras solares.
  • Refresca la piel. Aplica sobre la piel afectada una toalla limpia humedecida con agua fría o toma un baño de agua fría.
  • Aplica crema hidratante. Es importante que contenga sustancias calmantes como aloe vera o calamina.
  • Hidrátate. Hay que beber más agua de lo habitual.
  • Si te salen ampollas, no las toques. Si una ampolla se rompe, límpiala con agua con jabón suave. Luego, usa un ungüento antibiótico en la herida y cúbrela.
  • Cuando empieces a pelarte ve con cuidado e hidrata bien la piel.
  • Protege la quemadura solar de una mayor exposición al sol.
  • Remedios caseros. Hay una serie de remedios caseros que pueden aliviar los síntomas de la quemadura. Por ejemplo, la leche (aplicada suavemente con una gasa o un trapo) tiene propiedades calmantes que alivian el dolor de las zonas afectadas. Los ácidos del vinagre ayudan con la irritación de la piel. El pepino ayuda a restaurar la piel, además de sus propiedades calmantes.

Consultar a un médico con quemaduras del sol graves

En el caso de que estos remedios no funcionen es importante que consultes con un médico. Una recomendación que también debes seguir si:

  • La quemadura va acompañada de fiebre alta, dolores de cabeza, dolor intenso, deshidratación, confusión, náuseas o escalofríos.
  • Aparece un sarpullido en la zona.
  • Aparece una infección en la piel, cuyos signos son hinchazón, pus o estrías rojas que salen de la ampolla.
  • La quemadura ocupa una gran parte de tu cuerpo.

¿Por qué pasa eso? Principalmente porque no usamos, o no usamos bien, la crema bronceadora. Además, no seguimos los consejos de los expertos de no tomar el sol en las horas fuertes del día, reponer la crema bronceadora siempre que nos bañemos o tras una excesiva sudoración, protegernos bajo la sombrilla, hidratarnos bien… Y es muy importante hacerlo porque disfrutar del sol y ponernos morenos está muy bien, pero si no se tiene cuidado, las consecuencias pueden ser muy graves. Así que este verano disfruta del sol, pero con responsabilidad.

¿Cómo curar las quemaduras del sol?

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