Es la época del año donde las consultas de dietistas, nutricionistas, estéticos y psicólogos especializados en alimentación más llenas están. Llega el verano y todos queremos lucir «cuerpazo» en playas y piscinas.
Los expertos recomiendan hacer un registro con lo que se come, a qué hora se come, cuándo, si lo haces sentado o de pie. Y las sensaciones que tenemos tras comer: aburrimiento, enfado, tristeza, ansiedad y tras haber comido escribe también como te has sentido.
Tras esto, debemos ponernos en marcha y saber cuantos kilos debemos perder y empezar a trabajar. Revisemos nuestras despensas y tiremos todo aquello que no sea sano, elabora menús semanales y haz la lista de la compra.
Cuando se va a comprar, debemos ir sin hambre y seguir a pie juntillas la lista que hemos elaborado. Debemos tener una alimentación sana y saludable para ello debemos olvidarnos de la triste comida a la plancha y buscar recetas divertidas y apetecibles.
No debemos prohibirnos alimentos, pues incrementará nuestro deseo. Mastica despacio, y saborea cada alimento. Usa platos pequeños, de este visualmente al estar lleno el plato la sensación de nuestro estómago será la misma.
No te prohíbas nada porque la prohibición produce deseo. Así que, con calma y si te apetece un bocado de algo “engordante” hazlo despacio y saboreándolo mucho.. verás como no tendrás culpa y será un pedazo justo y exquisito.
Cuando comas, no hagas otra actividad, solo come y disfruta. Si sigues estos consejos y no solo llevarás una alimentación sana, sino que también conseguirás reducir esos kilos que te molestan de cara al verano.
Fuente: larazon.es